Un riñón es creado en laboratorio de bioingeniería

 

Los científicos de bioingeniería construyen un riñón funcional que puede ser trasplantado en una rata.

Simplemente no hay suficientes órganos donados para cubrir la necesidad. Es por eso que los científicos han estado soñando con crear órganos trasplantables en los laboratorios. Los científicos del Massachusetts General Hospital Center for Regenerative Medicine han dado un paso adelante con la creación de un riñón funcional de rata.

El proceso de bioingeniería no es tan futurista como el crecimiento de un órgano completo desde cero. Los investigadores comenzaron con riñones de ratas muertas y utilizaron un jabón especial para la limpieza y el proceso para depurar las células. Esencialmente, esto les dio una base de un riñón para trabajar, un lienzo en blanco.

El siguiente paso implica la regeneración del órgano mediante la inserción de células viables de la rata receptora mediante un proceso de vacío. Esta etapa es bastante delicada. “Tuvimos un buen número de riñones que fueron un frasco”, dice Harald Ott, profesor de cirugía en el Hospital General de Massachusetts.

El órgano se coloca en una cámara que imita el entorno de un cuerpo. Después de unos días, el riñón empieza a hacer una forma rudimentaria de orina. El riñón es luego trasplantado en una rata. Ott y su equipo han publicado los resultados de su trabajo en la revista Nature Medicine.

Esta no es la primera vez que los investigadores han desarrollado órganos de bioingeniería para ratas. Los científicos de Yale crearon tejido pulmonar funcional a través de un proceso similar en 2010.

Aunque el trabajo de los riñones es prometedor, aún es pronto. Los riñones de laboratorio habían reducido significativamente su función en comparación con la de los riñones sanos y originales. Ott espera mejorar en eso así como su equipo escala en el proceso para trabajar con los riñones humanos.

En última instancia, el proceso podría convertir órganos viables en órganos de trabajo que se hayan diseñado para que coincidan con cada paciente. Hay cerca de 100,000 personas sólo en los EE.UU. en una lista de espera para trasplante renal. Estos experimentos en la bioingeniería podrían algún día tener un impacto enorme en la vida de muchos.

“La bioingeniería podría ser la salvación de muchos pacientes en espera de un órgano específico”.

 

Fuente: www.internautas21.com